Un bosque tropical prístino y la accidentada belleza natural de la Península de Osa hacen de esta región una de las más hermosas de Costa Rica. Declarado uno de los lugares biológicamente más intensos sobre la tierra por la revista National Geographic, la península de Osa, junto con Bahía Drake, se han convertido en el primer destino de turismo ecológico.

 

Drake, es una bahía virgen, con una  exuberante vegetación, localizada al norte de la Península de Osa, a unos 20 km de la entrada del Parque Nacional Corcovado. Lleva su nombre por Sir Francis Drake, ya que se cree que en el siglo XVII el temido pirata escondió allí uno de sus tesoros más valiosos.

 

Lejos de la vía principal, Drake únicamente puede ser alcanzada por tierra durante la estación seca. El mar y el Río Sierpe, en los cuales transita un eficiente servicio de botes, y una pequeña pista de aterrizaje son las únicas vías de comunicación durante la temporada de lluvias. Aquí encontrará gran número de lodges de lujo, hoteles de pesca así como algunos de los hoteles ecológicos más remotos y espectaculares de Costa Rica.

 

 Desde aquí puede tomar un paseo de un día para bucear por la maravillosa Isla del Caño o también puede ir por el mar en kayak o disfrutar de la pesca deportiva, puede tomar un tour para observar los delfines y las ballenas o simplemente relajarse en la playa y tomar el sol. Para aquellos más aventureros hay una gira de noche donde le explicaran e informaran sobre la fascinante fauna  de la zona ya que es el hogar de muchos animales raros en peligro de extinción, incluyendo el puma, jaguar, águila harpía y la guacamaya escarlata.